Biografía de Santa Teresa de Jesús para niños
Hace más de 500 años, el 28 de marzo de 1515 concretamente, en la ciudad amurallada de Ávila, nació Teresa Sánchez de Cepeda y Ahumada, aunque hoy todos la conocemos como Santa Teresa de Jesús.
¡Descubramos un poquito más sobre ella!

Desde pequeña, Teresa era una niña muy inquieta y soñadora: le encantaba leer historias sobre héroes y vidas de santos, tenía una imaginación desbordante y soñaba con vivir grandes aventuras. De hecho, cuando tan solo tenía 7 años, planeó escaparse de casa para irse a tierras lejanas a luchar contra los enemigos de la fe cristiana. ¡Toda una exploradora del siglo XVI!
Sin embargo, su tío la encontró a tiempo y la llevó de vuelta a casa. Aunque no pudo viajar tan lejos como soñaba, con el tiempo descubriría un mundo aún más grande: el de la fe, la escritura y la enseñanza.
Una monja con muchas ganas de cambiar el mundo
Cuando creció, Teresa decidió entrar en un convento para convertirse a monja, pero en ese lugar no encontró la paz que esperaba y no podía rezar tranquila. Nuestra autora, como muchos otros monjes de la época, sentía que algo no estaba bien, que el verdadero sentido de la vida religiosa se había perdido.
Por eso, decidió hacer algo muy valiente: crear su propio convento, donde sus miembros vivieran de manera sencilla, en silencio y dedicados a la oración. Es así como, en 1562, funda el primer convento de Carmelitas Descalzas en San José de Ávila.
Esto, como podréis imaginar, pequeños lectores, no fue nada fácil. Muchos se opusieron a sus ideas, incluso dentro de la propia orden religiosa. Sin embargo, Teresa no se rindió y viajó por toda España fundando nuevos conventos (17 en total) y luchando por su sueño.
Escritora y poeta: sus obras más conocidas
Santa Teresa no solo fue una gran reformadora eclesiástica, sino también una muy buena escritora . Aunque en su época no era común que las mujeres escribieran, eso no la detuvo, convirtiéndose así en una de las primeras voces femeninas de la Literatura Española.
Teniendo en cuenta que su vida estaba entregada a la religión, sus libros no iban a ser menos, de manera que hablan, sobre todo, de su experiencia espiritual y se incluyen dentro de la Literatura mística del Siglo de Oro, a caballo entre el Renacimiento y el Barroco (donde encontramos otros autores como San Juan de la Cruz, del que quizá hablemos otro día).
Así, Teresa utilizaba la poesía para educar y entretener a las demás monjas del convento y, como no todas tenían el mismo nivel de conocimiento, hacía una poesía popular que todas pudieran entender y disfrutar. Por eso, escribe villancicos para cantar y poemas sencillos. Asimismo, en sus escritos habla de valores como el esfuerzo, la paciencia y la importancia de creer en uno mismo.
Algunas de sus obras más importantes son:
- 📖El libro de la vida, donde cuenta su historia y su camino de fe
- 📖Las moradas, una guía sobre cómo acercarse a Dios a través del pensamiento y la meditación
- 📖Camino de perfección, donde enseña a otras monjas cómo vivir mejor su fe
Esta autora fallece en Alba de Tormes en 1582 y, seis años más tarde, el reconocido escritor de la época Fray Luis de León publica sus libros y poemas por la gran admiración que sentía por ella.
Una mujer adelantada a su tiempo
Santa Teresa de Jesús no solo fue una religiosa y escritora, sino una mujer que rompió barreras en una época en la que las mujeres no solían tener voz, influyendo a muchas otras escritoras a lo largo de los siglos. De hecho, sus ideas eran tan valiosas que, muchos años después de su muerte, la Iglesia la reconoció como Doctora de la Iglesia, un título que solo tienen unos pocos santos en la historia.
Cada año, el 15 de octubre se celebra su festividad y su legado sigue vivo en los colegios, las iglesias y los conventos que fundó.